28 de junio de 2010

Cuestionada la legalidad en la desafectación de los aparcamientos del Campo Suel


El Ayuntamiento de Fuengirola ha aprobado en sesión plenaria la desafectación de los aparcamientos del Campo Suel a instancias del Equipo de Gobierno del Partido Popular, lo que hace que este bien público deje de pertenecer a todos los ciudadanos y pase a manos privadas. Este proceso crea gran incertidumbre entre los fuengiroleños que ven como el Ayuntamiento está vendiendo el patrimonio municipal y haciendo caja sin importarle nada el futuro de las generaciones venideras ni el de las próximas corporaciones.
Hace siete años la empresa ORECO resultaba adjudicataria de las obras de construcción y la concesión durante 50 años de la explotación de las 565 plazas de aparcamiento del Campo Suel. En este sentido, se ocuparon todas teniendo que pagar los usuarios 14.950 euros por el derecho de uso y disfrute de las mismas durante ese periodo de tiempo. Ahora el Ayuntamiento pretende que paguen otros 3.500 euros (en total 18.450 euros) para que pasen a ser propiedad de los usuarios. No todos han solicitado ser titulares. ¿Qué pasará con las plazas que seguirían estando bajo la tutela del Consistorio? ¿Cómo se va a realizar la desafectación del subsuelo sólo en parte?¿Cómo se inscribirían entonces registralmente? ¿Quiénes se harían cargo del mantenimiento de los aparcamientos? A todas estas dudas hay que sumar que ORECO ha renunciado a la concesión firmando la escritura pública de renuncia por parte de la mercantil con fecha 26 de mayo (un día después de haberse convocado el pleno en el cual ya estaba añadido este punto en el orden del día).
Si atendemos a este último criterio la empresa concesionaria se comprometía a pagar un canon de 30 euros por plaza al año al Consistorio. ¿Se le va a perdonar la deuda? Si es así la constructora ha hecho un gran negocio pues en 43 años que quedan de concesión le falta por pagar 728.850 euros, los mismos que, evidentemente, no entrarían a formar parte de las arcas municipales. Si continuamos hablando en cifras ORECO habría obtenido unos beneficios de 8,4 millones de euros que restándole los aproximadamente 2,5 millones de euros que haya podido costar la ejecución de la obra sigue quedándole la suculenta cifra de 6 millones de euros de beneficio.
Ante esta situación de confusión hay que poner en duda la legalidad de este proceso donde ni siquiera existe el informe de intervención sobre este asunto. Tampoco consta en el expediente el número de solicitudes para que se produzca este cambio jurídico. En el contrato que ORECO firma con los titulares de las plazas se manifiesta expresamente que la empresa es titular de una concesión de obra pública y de su posterior explotación, siendo el comprador del uso y disfrute de esa plaza de aparcamiento. Por tanto la premisa de articular la desafectación en la solicitud de los titulares queda vacía de contenido ya que estos no tienen la calificación de concesionarios y la aprobación del expediente estaría en claro fraude de ley.
Estos motivos son los que han llevado al Partido Andalucista a votar en contra de esta medida tan perjudicial para el ayuntamiento y los ciudadanos en particular, que conlleva la perdida de la propiedad municipal de unos aparcamientos que tienen encima un campo de deportes.

24 de junio de 2010

El PP criticó las políticas de pago con solares empleadas por el PSOE, y ahora pretende hacer lo mismo en Fuengirola


Con estas acciones, Oña condena a pagar a las próximas Corporaciones su mala gestión.


El Partido Andalucista ha criticado la mala gestión y poca austeridad de la que viene haciendo gala el PP con sus políticas de endeudamiento durante los últimos años. Por este motivo tanto el Grupo Municipal como el Partido Andalucista no aprobaron los presupuestos municipales de años anteriores, debido al poco rigor austero de los mismos. Esa mala gestión está arrastrando a las arcas municipales a un precipicio cierto, sometiendo al municipio a unas políticas de endeudamiento sin precedentes, llevadas a cabo en los últimos años con unos gastos poco rigurosos.
Los grandes desfases económicos del Partido Popular en el gasto de los últimos años, poco responsable, han creado un agujero en la contabilidad del municipio que ahora, para hacer frente a los pagos de las deudas contraídas con proveedores, se tengan que ofrecer a algunas de estas empresas a las que se les adeudan cantidades elevadas tanto en la cuantía como en fechas de las facturas que datan de 2006 y 2007 (fechas que nosotros conozcamos), la forma de pago de las deudas ofreciéndoles propiedades municipales.
A los Andalucistas nos parece gravísimo y poco ético, que el Partido Popular recurra a la venta de edificios municipales para el pago de estas deudas, como son los locales municipales ubicados en el mercado del Boquetillo, el piso que fue sede de la coordinadora del necesitado y otro local en el edificio horizonte.
También desde el Partido Andalucista criticamos los métodos empleados por los populares, a nuestro entender poco rigurosos, aprobando la prescripción de deudas a pequeños empresarios que realizaron trabajos o algunas tareas para el ayuntamiento. Es poco ético esperar a que la deuda se haga vieja para presentarla como no reclamada y aprobar seguidamente la prescripción de la misma, hecho cierto que ocurrió recientemente.

17 de junio de 2010

Los pensionistas Andaluces por debajo de la media


Siete de cada diez pensionistas en Málaga viven con menos de 600 euros al mes. Estos datos son aportados por la Agencia Tributaria correspondiente al período de 2007, que dice que de los 243.871 receptores de estas prestaciones que viven en Málaga y provincia 176.330 reciben una paga media anual por debajo de los 7.723 euros, es decir que cuentan con menos de 551 euro al mes para poder vivir, después de trabajar toda una vida.
Dentro de estas personas, el colectivo más numeroso es el de las viudas, que en málaga suponen 58.923 con rentas por un importe medio de 528 euros mensuales.
Pero cuando se habla de pensiones mínimas hay que hablar también de las no contributivas que se conceden a ciudadanos que no han cotizado el tiempo suficiente para alcanzar otros niveles. De este tipo de pensiones hay en Málaga y provincia 21.243 perceptores, financiadas a través de los impuestos transferidos a nuestra Comunidad. En el caso de Andalucía se concede una paga de 336,86 euros cuando el entorno familiar no supera un límite establecido por la Junta de Andalucía que para dos personas se establece en 8.000 euros anuales. Quiere decir que si uno de ellos obtuviese ingresos por 600 euros mensuales el cónyuge no podría solicitar la pensión no contributiva. En esta situación de desamparo se encuentran miles de andaluces. Además esta pensión no contributiva está sujeta a unas normas muy estrictas que en el caso de que hubiera un ingreso extra en la casa por cualquier circunstancia, sería motivo para una rebaja de la pensión o la pérdida total de la misma.
Los Andalucistas nos hacemos eco de la opinión de Juan Cerrillo, secretario de Organización de la Federación de jubilados y pensionistas de Málaga, que compartimos, denunciando que las pensiones no contributivas están muy por debajo de lo que establece la Constitución Española.
Un pensionista andaluz cobra de media una pensión de 622,85 euros, mientras que en el País Vasco cobra 845,17 euros, un madrileño 800,91 euros y un asturiano 816,54 euros. También cobran más que los pensionistas andaluces, los navarros, los cántabros, los canarios o los castellano manchegos. Una vez más observamos como las distintas políticas aplicadas desde el gobierno de España perjudica gravemente los intereses de los pensionistas andaluces.
Demandamos que las pensiones mínimas estén acorde con el aumento del coste de la vida y se asimilen a las del resto de España. Reivindicamos que se incrementen en Andalucía las protecciones sociales porque las medidas existentes son pocas e insuficientes. Se hace necesaria, por tanto, una redistribución de la renta que repercuta con mayor intensidad en las pensiones mas bajas.
No podemos permitir que haya personas con pensiones que no les permiten vivir dignamente.